Calibrar.
Las experiencias,
vivimos por ellas. Nos dan la vida y nos recuerdan el porqué de seguir
continuamente. Nos dan la ambición de conseguir las metas. Pero, ¿necesitamos
siempre tener lo máximo?
No hay un punto de
parada, no encontramos el gozo después de conseguir algo, buscamos más.
Debe ser por esto
que me sienta agobiado, sin intención a nada. Frustrado.
Ahora mismo tengo
muchas metas en mente y casi todas están paradas por sobrepasarme con la
ambición, por no saber controlar el impulso, necesito tiempo y descanso. Tengo
una gran necesidad de reposar la mente y volver a calibrar lo que necesito para
ser feliz, manejar de nuevo los puntos que me hacen feliz y ver hacia dónde va
todo.