Futuro.
Agregamos al futuro
nuevos horizontes mientras vamos dejando atrás los caminos logrados del pasado.
No hay fuerza que consiga detener ese sentimiento de conquista. Es un continuo
crecer, avanzar y lograr.
¿El fin? No existe.
No entendemos de limitaciones. Pero todo esto no lo escribo porque no se sepa,
si no por el hecho de que para lograr esas conquistas se hace daño, a veces,
por no saber dónde está el límite.
El precio por
conseguir todo lo que nos proponemos, es manipular sin pensar lo que aplastamos
inconscientemente a quién se coloca en el camino de esos objetivos. Cada vez
cuesta más ser más humano, tener más cabeza… y sólo se que esta vida es como
lanzar a la diana, a veces se acierta y otras se falla.